En el Conjunto Residencial Ecológico Armonía (CREA) en Araure estado Portuguesa, se encuentra una estructura de concreto totalmente subutilizada y en estado de abandono. La estructura, está compuesta por solo vigas y columnas que forman un cubo de 12 por 12 metros de base y 12 metros de altura, con un tanque de agua de 20 mil litros que corona su nivel superior. Se propone la idea de reciclar esta estructura para crear una edificación lúdica que tenga un uso flexible que puede cambiar y evolucionar con el tiempo, y que además de uso a tres contenedores de 12 metros de largo que se encuentran en la propiedad. Cada contenedor se inserta en un nivel distinto de la torre, y estos tienen un volado de 6 metros con respecto a la estructura y están acompañados de plataformas metálicas para que además de tener los espacios más cerrados y controlados dentro del contenedor poder tener espacios abiertos dentro de la estructura. Finalmente, como fachada para la estructura se propone una piel compuesta por marcos metálicos y tensores por donde cuelga una enredadera vegetal, esta piel se separa un metro y medio de la estructura de concreto, el espacio que queda entre ambas estructuras se utiliza para incorporar la circulación vertical que permite acceder a todos los niveles de la torre, hasta llegar al nivel del tanque de agua, nivel que sirve de mirador hacia los alrededores llenos de vegetación y naturaleza.